El hecho de haberse convertido en un ídolo de masas de la noche al día no parece haber afectado a un Robert Pattinson que todavía tiene los pies en la tierra, pese a su juventud. A sus 24 años, el actor británico se comporta exactamente igual que cuando comenzó a rodar la saga Crepúsculo hace casi tres años.Al menos eso es lo que dice una compañera suya de reparto. Ashley Greene asegura al Sunday Times (según recoge el Daily Star) que a Pattinson la fama no se le ha subido ni un poco a la cabeza:
“Como persona, no es como cualquier otra que haya conocido en Hollywood… No tiene ego. Todo el mundo lo quiere, pero el no se deja afectar por eso y nunca parece amedrentado por la atención que recibe. No ha cambiado ni un poco desde que comencé a trabajar con él en la primera película de Crepúsculo”.
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